Una ola de frío polar ha hecho tiritar la isla. La nieve ha teñido de blanco Mallorca dejando estampas increíbles y nunca vistas. Desde 1956 no nevaba con tanta fuerza; una visita inesperada que nos ha soprendido y maravillado a todos.
Mallorca se ha calzado un outfeet invernal de lujo. Febrero es sin duda un momento muy especial para conocer la otra cara de una isla maravillosa que ofrece al visitante mucho más que playas de arena blanca y acogedores chill out. En junio de 2011 la UNESCO declaraba la Serra de Tramunana Patrimonio de la Humanidad. Su paisaje, su valor patrimonial, su cultura y arqueología la convierten en una de los parajes más mágicos de Mallorca, de la que se cuentan decenas de leyendas. La Serra, recorre la isla de este a oeste en la zona norte. Está formada por 19 municipios, todos bellos pueblos de montaña con gran carácter estético. Su artesanía, gastronomía y su arquitectura son sorprendentes, como de cuento de hadas, ofreciendo al visitante numerosas propuestas con la naturaleza y la gastronomía autóctona como protagonistas.
Os dejo algunas propuestas y lugares que no os podéis perder en esta época del año:- Comer arroz brut (típico de Mallorca) y cochinillo junto a la chimena del restaurante en Orient.
- Visitar las casas del Archiduc Lluís Salvador en Valldemossa y parar el mirador de Sa Foradada.
- Subir al Monasterio de Lluc, un santuario de montaña con un paisaje natural increíble.- Contratar alguna excursión senderista y recorrer alguna de las rutas de la Pedra en Sec que recorren la Serra de Tramuntana. Descubriréis la cara más desconocida de la isla, los paisajes más bellos y queridos por los isleños.
- Los pueblos de montaña de Valldemossa, con su riquísima coca dulce de patata, Sóller, Fornalutx y Deià son visitas obligadas que no os podéis perder en esta época.-
